Mapa de calor:

El ciclo europeo ha estado marcado por la publicación de los datos de inflación interanual de la eurozona, que poco a poco van descendiendo.

A nivel de riesgos, los niveles han subido ligeramente respecto la semana pasada.

En el valor de mercado europeo se muestra como semana a semana debido a la compresión de multiplos, las valoraciones son más atractivas.

En septiembre, la inflación interanual de la eurozona registró una significativa retracción, situándose en el 4,3%, marcando así la tasa más baja desde octubre de 2021, según datos preliminares de Eurostat. Este descenso de nueve décimas se inscribe en un panorama económico donde España se erige como la economía con la inflación más contenida entre las cuatro grandes de la zona, ostentando una tasa armonizada del 3,2%, notablemente inferior a sus homólogos, Francia (5,6%) e Italia (5,7%). Alemania, por otro lado, experimentó una caída considerable, alineándose con la media de la eurozona. El mes en cuestión presenció reducciones en las tasas de inflación en todas las categorías de productos, con la energía registrando una tasa negativa del 4,7%. Mientras los Países Bajos manifestaron una tasa de precios negativa, Eslovaquia, Croacia y Eslovenia enfrentaron los mayores incrementos inflacionarios. Este panorama inflacionario refleja las dinámicas económicas divergentes en la eurozona y subraya la necesidad de políticas monetarias y fiscales equilibradas para abordar las disparidades. La vigilancia continua y la adaptabilidad serán cruciales para navegar en este entorno económico fluctuante y garantizar la estabilidad financiera en la región.