El mercado da una modesta tregua a las tendencias bajistas que hemos visto estas pasadas sesiones, a esperas de los resultados empresariales y revisión de guidance de la semana que viene. El Eurostoxx50 y el S&P500 suben, a pesar del primero estar sumergido en el pesimismo con la ratio put/call en mínimos de los últimos dos años. A través del GVC momentum podemos determinar que, a pesar de los dos índices encontrarse en una fuerte tendencia bearish, el índice estadounidense muestra claramente un mejor tono de mercado. Por la parte de riesgos, se moderan respecto a la sesión de ayer y, al igual que el indicador de tendencia, Europa muestra una peor situación que Estados Unidos. Destacar el spread 2A-10A estadounidense que se vuelve a poner en negativo y la reducción del VIX de la misma región. Con especial atención, el barril de Brent y el cobre siguen bajando de precio, al igual que las commodities en su mayoría, y el euro también continúa su depreciación. Ayer tuvimos las Actas de la FED, que ven probable una política más restrictiva si la inflación no baja, donde «un aumento de 50 o 75 puntos básicos probablemente sería apropiado en la próxima reunión». Una vez descontando esta información, los futuros abren en positivo, con retrocesos en el Nikkei225 y con datos macroeconómicos relevantes del mercado estadounidense como el desempleo del país.