Cycle Report
El S&P 500 culminó septiembre con una sólida revalorización mensual del +3,6 %, alcanzando los 6584.29 puntos —su nivel más alto en lo que va del año— y consolidando un entorno de clara recuperación de riesgo. Este avance estuvo respaldado por un entorno técnico constructivo: el GVC Momentum cerró en 0.21, manteniéndose en zona positiva por tercera semana consecutiva, mientras que el GVC Risk cayó hasta 17.28, reflejando una compresión de la volatilidad que ha favorecido el apetito por activos de riesgo. La rentabilidad anual del índice, con un avance del +0,32 %, vuelve a situarse en terreno firme tras meses de desempeño errático.
El catalizador central del mes fue el recorte de tipos por parte de la Reserva Federal. El 17 de septiembre, el FOMC redujo la tasa en 25 pb, ubicándola en el rango 4,00 %–4,25 %, y dejó abierta la posibilidad de dos recortes adicionales antes de que finalice 2025. Si bien la decisión no fue unánime, la Fed justificó su postura en un mercado laboral que comienza a mostrar grietas y en una inflación que, aunque aún elevada, da señales de moderación. Este giro monetario dio un impulso inmediato a las bolsas y aligeró la curva de tipos en los tramos cortos, mientras que el dólar se debilitó, beneficiando al entorno de flujos hacia mercados desarrollados, incluida Europa.

Los datos macro refuerzan la narrativa de enfriamiento: la sorpresiva caída del empleo privado (–32.000 en septiembre según ADP), la contracción en la confianza del consumidor (94,2) y la desaceleración del consumo interno marcan un giro claro en el ciclo económico. A esto se suma la creciente tensión institucional en torno a la independencia del banco central, con intentos de injerencia política desde la Casa Blanca que, aunque contenidos por fallos judiciales, siguen representando un riesgo latente para la credibilidad del marco monetario estadounidense.
Si bien el entorno técnico sigue siendo favorable —con GVC Risk en mínimos del año y Momentum positivo—, el mercado entra en octubre con señales de sobreextensión. La advertencia de Goldman Sachs sobre una posible vuelta de la volatilidad debe tomarse en serio: reacomodos en el sector tecnológico, riesgos macro latentes y el calendario político podrían amplificar la sensibilidad de los mercados a cualquier sorpresa.
La recomendación es de prudente optimismo: mantener exposición táctica a renta variable, especialmente en sectores defensivos y tecnológicos con fuerte generación de caja, pero comenzar a implementar coberturas ante la posibilidad de un repunte de volatilidad. La Fed ha dado un respiro, pero la economía está dando señales claras de fatiga. Octubre será, con alta probabilidad, una prueba de fuego para el equilibrio entre estímulo monetario y realidad macroeconómica.

